viernes, 25 de febrero de 2011

Alisas

Esta semana le llega el turno al puerto de Alisas. Salimos desde La Cavada a las 16:50 con 2 km de falso llano para ir subiendo poco a poco. Al final serán un total de 12 km de subida. Las pendientes no son muy duras, aunque no bajan del 6%.




La subida tiene su encanto. Es un puerto que sin ser duro tiene algo especial. Sobre todo la última parte de la ascensión, una vez pasado el pueblo de Las Calzadillas, donde la carretera empieza a zigzaguear con unas hermosas curvas en herraduras que nos permiten tener unas bonitas vistas de la ascensión.





Casi ya en la cima podemos encontrar un monumento al ciclista en una de las curvas de herradura. Desde uno de los miradores de la subida podemos ver al fondo la Bahía de Santander.


Una vez coronado, podemos contemplar el valle de la capital del mundo, Arredondo.


Como de costumbre, fotografiamos para dejar constancia de la hazaña.

martes, 22 de febrero de 2011

Portillo de Lunada

Después de haberme quedado sin coronar cima la semana anterior, la tarde del sábado 18 de febrero me fuí hasta San Roque de Riomiera para realizar 16 km de subida al Portillo de Lunada. Había estado lloviendo durante todo el día, pero eso no es motivo para quedarse en casa.



Comencé a las 16:00 horas. Como en la semana anterior, me puese un fuerte ritmo desde el principio, con plato mediano toda la ascensión. El primer cuarto de la ascensión estuvo lloviendo, no mucho pero lo suficiente para mojarme. Sobre las 17:40 coroné puerto. Aquí tenemos la foto.


Aquí vemos las vistas de la provincia de Burgos.


Como veís, la nieve estaba presente, incluso en las orillas de la carretera. La verdad que hacia frio o eso decían mis enrojecidas piernas durante la bajada.




Aquí vemos las impresionantes vistas con las serpenteantes curvas del puerto.


Y aunque parezca mentira por ahí acabo de subir jejeje



Y cuando quedaba apenas dos o tres km de bajada, empezó a diluviar y la mojadura fué de campeonato.

Portillo de Lunada

Con una decisión de última hora y sin apenas haber preparado la ruta, el viernes 18 de febrero, una vez acabé de trabajar preparé los bártulos y me fuí hasta Mirones para subir el Portillo de Lunada.



La salida la tomé a las 16:55 y con 24 km por delante me puse un ritmo alto para que no se echase la noche encima. Los primeros km son de calentamiento, hasta que pasas el puente y enfilas dirección a Linto. Las rampas en este punto alcanzan un 12% y hacen mella. Después de un par de km de subida llegamos a una bajada que nos lleva hasta pie de puerto. Desde el desvío de Lunada hasta la cima hay 16 km.

La subida tiene una pendiente media del 8%, pero los km en las piernas hacen daño y el ritmo va descendiendo a medida que vamos ascendiendo. Aún así, el platillo no me fué necesario utilizarlo.

Hasta que no se llega a mitad de puerto no sabía a simple vista hasta donde tenía que llegar. Pero llegado dicho punto ya sabia que iba a tener muy dificil coronar puerto puesto que la noche llegaría sobre las 19:15.

Aún así, estuve a punto de hacerlo. Me quedarón apenas 1.5 km. Unos metros pasado la última curvona decidí volverme porque la visibilidad ya era casi nula. Para muestra un botón.


Y esta fotografía está tomada en el mismo punto anterior, y como se aprecia no se ve ya el cuentakilometro.


El descenso fue una locura. De estar anocheciendo a hacerse de noche pasaron apenas 10 minutos. De loco me debió de tachar el guarda de bosque cuando me vió pasar a mitad de puerto. A punto estuve de decirle si me llevaba en su Jeep...

Aunque no se veía mucho, la carretera se veía. Los peores momentos llegaron una vez bajado el puerto, ir por carretaras secundarias sin apenas visibilidad, la verdad es un poco peligroso. La primera y la última...

Al final, llegué a Mirones a las 20:00 horas sano y a salvo.